(Del gr. θυσάνουρος).
1. m. Zool. Insecto de pequeño tamaño, cuerpo brillante, áptero y sin metamorfosis, con antenas largas, órganos bucales rudimentarios y abdomen terminado en tres filamentos largos y delgados. U. t. c. adj.” Fuente: Diccionario on-line de la RAE.
Inofensivos para el hombre, pero capaces de destruir su historia. O mejor dicho, sus libros de historia.
Estos animalitos, son también conocidos en muchos países como Pececillos de Plata. Son insectos de apariencia prehistórica y en realidad son muy antiguos. Ya que existen varios fósiles de insectos de esta orden, que datan de miles de años atras.
Los pececillos de Plata, son insectos huidizos, nocturnos, les gustan los ambientes húmedos y habitan por lo general en ranuras y lugares pequeños e inaccesibles, como detrás de los muebles o entre los libros.
Se alimentan principalmente de cosas que tengan un rico contenido en glucosa, pero encuentran un especial deleite por la celulosa del papel. Es común que estos curiosos bichitos devoren nuestros libros, periódicos, fotos o documentos de nuestra biblioteca.
Por la anatomía y naturaleza de sus mandíbulas, no les es posible arrancar o cortar trozos de hojas, sino que paulatinamente, las adelgazan.
En pocas palabras, son pequeños devoradores de libros, al igual que muchos amigos lectores y escritores, y claro está, al igual que yo.
Pero, como soy mujer, quise añadirle un toque femenino. De ahí “Tisanura” o “La pececilla de plata”.
